A veces también me pasa
No tengo a quién llamar cuando estoy triste. Sí, a veces también me pasa. Ahora, por ejemplo, me pasa.
Echo de menos marcar un número, para decir simplemente que me apetece quedar a tomar algo porque necesito hablar porque estoy triste, y saber que hay alguien al otro lado que recoge el testigo, que me acompaña y que me permite desahogarme.
Y no sólo eso, sino que también me escucha, me entiende, me anima y hace que al final me vuelva a casa con una sonrisa.
Ahora estáis lejos. Aún no he conseguido encontraros aquí.
Os echo tanto de menos, AMIGOS...